Domingo Autopartes inicia en 1987, en el poblado de San Miguel Coatlinchán, Texcoco, Estado de México. Es aquí donde se descubrió el Dios TLALOC, el monolito más grande del continente americano y uno de los 5 más grandes del mundo. El señor Domingo Sánchez emprende este negocio familiar con el entusiasmo de sus hijos, en especial el de Milton Sánchez y la colaboracion y energía de la nueva generacion, sus nietos: René y Roberto. Siempre comprometidos y responsables en proveer de accesorios de primera calidad, conscientes de ofrecer precios accesibles para los amantes de los automóviles que gustan de invertir en ellos porque comprenden que el automóvil es una carta de presentación, es como su segunda casa.